Entre las multiples actividades que el festival propuso este año se encuentran conciertos en el hotel Royal Christania o también una conferencia de la mano de Harald Fossberg, quien acaba de presentar un libro que relata los origenes del black metal y quien repasó la historia de un género que ha pasado del underground a ser conocido en el mundo entero.
Execration
Los noruegos Execration fueron los primeros en empezar en el majestuoso Rockefeller. Puntuales y con una técnica abrumadora, Execration convirtieron el Inferno en la atmósfera perfecta para abrir el primer día de festival. Nos recuerdan a Grave Miasma con un toque más thrash. Voces de ultra tumba y riffs horripilantes que empiezan a sacudir algunas de las cabezas del público si bien todavía más de uno no se había acabado de despertar.
Inner Sanctum
Inner Sanctum de India era una de estas bandas que no nos podíamos perder. Ya no por su calidad, sino por su casi exclusividad. Fueron de las bandas que más ganas le puso y en el público nadie se quedo defraudado. Una de las ventajas del John Dee es la proximidad que hay entre el público y la banda y eso consigue que la energía encima del escenario desborde también hacia abajo. Así que mientras el cuello de Gaurav Basu (vocalista) rodaba como un turborreactor el público animaba alzando los puños como si de asesinos en serie se tratara. Su mezcla de Death y Thrash está muy lograda y es una banda altamente resolutiva en directos. Una de las mejores del festival!
Septicflesh
Otra banda que no cansa a nadie son los griegos Septicflesh. Aprovechando su gira por Europa con Moonspell, los helenos se subieron a la fría noruega para traernos su Vampire Of Nazareth, tema que nunca falta en sus directos desde que salió el épico “The Great Mass” pero su último “Titan” no se queda nada lejos con toques incluso más oscuros que en sus primeros álbumes, pero nosotros siempre nos quedamos con los clásicos, Prometheus y Communion nos hicieron nuestro día.
Antichrist
Antichrist quienes podía parecer una de las bandas más oscuras del black metal son ni nada más ni nada menos que una banda de thrash de Suecia con un toque casi de NWOBHM. Riffs eléctricos y temas acelerados para “desintoxicarse” de tanto black metal. Puede sonar exajerado pero para nosotros fueron una de las bandas que mejor nos entró, eso si, acompañado de una cerveza. Eran completamente desconocidos para nosotros y eso que la banda se ha paseado por varios festivales e incluso en estados unidos.
ROCKEFELLER y JOHN DEE
No son nuevos en el Inferno pero como si lo fueran. Era una de las bandas más esperadas, sino la que más, de este primer día. 1349 cuenta con una alineación de lujo y se mantiene como una de las bandas más fieles al género. Por si fuera poco 2014 ha significado el lanzamiento de su último trabajo Massive Cauldron of Chaos, que ha entrado con mucha potencia en el mercado y ha supuesto uno de los álbumes más vendidos del género en este ultimo año. Por eso no es de extrañar que la banda anunció días antes que iba a tocar este último trabajo en su integridad. El inicio del concierto siempre con Frost y Archaon escupiendo una llamarada de fuego y acto seguido el recital empieza acompañado de impresionantes detonaciones y fuegos artificiales. Al contrario de las otras veces el sonido es excelente, demasiado limpio quizás para lo que es la banda. No faltaron los clásicos como I am Abomination o Sculptor of Flesh.
1349
Ensiferum
La sala John Dee no era definitivamente el espacio idóneo para el concierto de Ensiferum. Si bien la banda seguramente disfrutó del ambiente cálido, en el público no había espacio para moverse, suerte que nosotros nos quedamos atrapados al lado de una barra, pero la circulación de personas quedó completamente atascada. Así que aguantamos poco rato pero vimos los nuevos temas: Axe of Judgement, Heathen Horde o One Man Army de su último trabajo One Man Army. Emmi Silvennoinen nos tocó piezas de folklore finesas con el acordeón, algo que, según ellos, desentonaba en un festival de black metal. La verdad es que la banda en sí, saltaba un poco a los ojos viendo el resto del cartel, pero de público no faltaba y la verdad es que temas como Iron o Into the battle nos entraron bien como aperitivo de lo que sería la última cena del día servida por Behemoth.
Behemoth
Si hay una banda que ha marcado territorio en 2014 y no solo en el mundo del metal extremo, sino en toda la escena del metal, ha sido Behemoth. Su último Opus “The satanist” es ya su mejor trabajo de su carrera, o al menos así es considerado para la mayor parte del público y ha conseguido subir de escalón a la banda, entrando en la champions leage de los mainstages allí donde van. Festivales como Hellfest o Wacken incorporaron a la banda en su parrilla y el Inferno no podía ser menos, sobretodo sabiendo que la banda tiene una de las puestas en escena más espectaculares que hemos visto. Su setlist no escondía ni secretos ni sorpresas. Empezando con Blow Your trumpets Gabriel y acabando con el clásico The Chant For Escathon 2000. No falto nada, fuego, fuego y más fuego. La mejor parte de todas en la que los dos anticristos arden acompañado con Christians To The Lions. Messe Noir, At the Left Hand ov God y Alas, Lord is Upon Me, fueron de los mejores temas. Para acabar el recital, un pequeño bis con O Father, O satan O Sun que inundo el Rockefeller de confetis acompañado con un masivo aplauso del público. Una vez más, Behemoth fueron majestuosos.
