El jueves es conocido como el “Night to Remember” es decir, solo hay grandes actuaciones en los mainstages, pero el resto de escenarios están cerrados. Así que lo mejor que se puede hacer es disfrutar de las actuaciones de ANNIHILATOR, THUNDER, DEEP PURPLE y RAMMSTEIN. Todas estas bandas acompañadas con un Wacken Blut, el Glühwein edición verano que se comercializa con la marca W:O:A.
WACKEN DIA 1
Para comer también hay una amplia selección de paradas de todo el mundo: pasta italiana, fajitas mexicanas, fideos chinos, hamburguesas americanas y los excelentes pinchos de carne alemanes. Además en el Wackinger Village (una zona ambientada en la época medieval) se puede probar especialidades y vinos de la época. Sin duda hay una ruta gastronómica importante que hacer, pero la hora de los conciertos se acercaba. Con una alarma se da el tiro de apertura de la zona de los mainstages. Todo el mundo entra corriendo. Los Skyline ya están listos. ¡Empieza el Wacken Open Air 2013!
El día empezó con resaca y café en el beergarden, el punto de encuentro de todos los metaleros alemanes, donde se puede disfrutar de comida y cerveza autóctona del país y con un escenario donde actúan bandas de Schleswig-Holstein.
SKYLINE
Los míticos Skyline, banda formada en Wacken y que participan en el festival desde su primera edición, fueron los encargados de dar la bienvenida a los metaleros desplazados hasta el norte de Alemania. Los covers se basaron en una lluvia de temazos: Strong Arm of the Law (Saxon), Still of the Night (Whitesnake), Turbo Lover (Judas Priest), Paranoid (Black Sabbath), Bark at the Moon (Ozzy Osbourne), Kashmir (Led Zeppelin), T.N.T (AC/DC) y acabaron con Paradise City (Guns N’Roses). Este año no tocaron Engel aunque tampoco lo hicieron Rammstein.
DEEP PURPLE
La banda legendaria estaba dispuesta a demostrar que pese a su edad, siguen en forma y que sus miembros están viviendo su segunda juventud. Aún así de todos sus miembros el único que parece estar en forma es Steve Morse, que demostró a todo el festival su gran talento con la guitarra. Ian Gillan conserva buena voz pero le faltó carisma y empatía con el público. El show estuvo repleto de clásicos: Highway Star, Into The Fire, Hard Lovin’ Man, Contact Lost, Hell to Pay, Lazy o el grande Perfect Strangers. Con el sol y el vino vivimos el concierto de una forma más llevadera, pero seguramente Deep Purple no era la banda que más encajaba en aquel momento.
Smoke on the water animó al público, como artista invitado estuvo Uli Jon Roth y dieron paso a los tres bises: Green Onions, Hush y Black Night. Los temas fueron buenos y la interpretación de ellos muy lograda. Un buen concierto aunque otros grupos seguramente hubiesen estado mejor.
RAMMSTEIN
Bloquear un escenario todo un día para una sola actuación en el Wacken sorprende bastante pese que sea bajo la petición de una de las bandas más aclamadas en el mundo. Rammstein habían estado en boca de todos durante años cuándo se hablaba de cabeza de cartel en el festival alemán. Millares de emails habían recibido los organizadores pidiendo la inclusión de la banda alemana. La excusa que dio Christoph Schneider a todo eso: que el Wacken es un festival de heavy metal y que ellos no practican del todo este género. Seguramente los aspectos comerciales fueron los únicos motivos por los cuales Rammstein tardó 24 años en aparecer por el festival.
Igualando a Iron Maiden en 2008 y Judas Priest en 2011 la zona de los mainstages quedó inundada de gente, seguramente por eso los organizadores del Wacken aprovecharon para distribuir gafas 3D y presentar el tráiler de una nueva película que debería ver luz en 2014 sobre el festival.
Eran las 10 y 20 de la noche y una cortina traslucida cubría el escenario. Cinco golpes de batería sincronizados con 5 cohetes que salieron de detrás del escenario. La gente aclama la llegada de Schneider en la batería. Los que habíamos visto su tour en Europa ya sabíamos con que tema empezarían. Los que no, lo supieron entonces: otra vez los cinco cohetes y otra y otra y Ich tu Dir Weh ya estaba sonando. Bajó el telón y lo primero que vimos fue a Till
Lindemann con su chaqueta de plumas rosas bajando al escenario sobre una plataforma. Los temas fueron compuestos por los clásicos de su discografía con algunas incorporaciones: Wollt ihr das Bett in Flammen sehen, Keine Lust, Sehnsucht y Asche zu Asche. Los grandes shows de llamas vinieron con Feuer Frei!, Mein Teil y Benzin. Temas sorprendentes como Wiener Blut y Ohne Dich e indudables clásicos como Du Riechst so gut, Links 2-3-4, Du Hast e Ich will. El público alemán enloquecido cantaba de la primera a la última estrofa de cada canción. Algunos temas del bis se pudieron intuir, otros sorprendieron más como la versión acústica de Mein Herz Brennt quién creó un momento mágico en el festival.
Sonne, con la colaboración del cantante folk alemán Heino y Pussy, con el cañon-pene escupiendo espuma y millones y millones de confetis volando en el aire. Hora y tres cuartos de concierto que pusieron fin a su gira europea y a 24 años de espera. Otro concierto que pasará a la historia.
Fuente de la imagen: www.wacken.com
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